En contrapunto a la Semana Santa, que es una época del año de austeridad y recogimiento, el carnaval es todo lo contrario, un momento de disfrute y de fiesta en donde la carne es la protagonista. El concepto de disfrute de carne se da en dos ámbitos. Con el primero de ellos, se aprovecha en estas fechas para comer la carne roja que se quiera puesto que, según la tradición católica, durante la Cuaresma no se podrá. Y por otro lado es un aspecto más metafórico del propio cuerpo humano, dejándonos llevar por los placeres de la vida y la diversión.  

El Carnaval es una época de creatividad, de excesos y de sátira a los poderes públicos y políticos de cada época. Se suele celebrar con fiestas llenas de disfraces, comida, color y música.